Si empleamos la definición en sentido amplio, podemos diferenciar los siguientes tipos
Ciberacoso (en sentido estricto)
Acoso entre
adultos. Tanto la víctima como el causante son mayores de edad.
Ciberacoso sexual
Acoso entre adultos
con finalidad sexual.
Ciberbullying (ciberabuso, cibermatonaje, cibermatoneo)
Acoso entre
menores.
Consejos para evitarlo
Estos son consejos generales para evitar cualquier tipo de acoso. Si
estás interesado en saber más para el caso concreto del ciberbullying desde el
punto de vista del menor y de sus padres o profesores, te recomendamos
visitar Ciberbullying.com.
Protégete
contra el malware con un buen antivirus, un buen cortafuegos y
otras medidas técnicas. Algunos tipos de programas maliciosos pueden ponerte en
riesgo de sufrir algún tipo de ciberacoso.
No respondas
a flames ni a otro tipo de provocaciones enviadas en público o en privado.
Vigila muy
bien a quién das tus datos de cibercontacto: teléfono móvil, e-mail, dirección
de páginas personales, etc.
Búscate a ti
mismo/a en Internet cada cierto tiempo, o mejor, activa una alerta que lo haga
automáticamente por ti. Busca también tu número de teléfono y tu e-mail.
Lee bien las
condiciones de uso de las comunidades virtuales donde te inscribas y comunica a
sus webmasters los incumplimientos de que seas testigo.
Si eres menor
y sufres algún tipo de acoso, cuéntaselo a tus padres o a tus profesores antes
de hacer nada.
Bloquea a la
gente que te moleste en el chat. Borra automáticamente los mensajes de la gente
que te moleste por e-mail (o guárdalos sin leer, por si acaso necesitas más
tarde pruebas de su actuación). Ignora a los que te provoquen en los foros.
No utilices
nombres de usuario ni avatares provocativos.
Si recibes
amenazas no borres las pruebas. Guárdalas y avisa a la policía.
Respeta la
netiqueta.